Características Generales del signo Virgo
Simbolo: La Virgen
Período: del 23 de Agosto al 22 de Septiembre
Elemento: tierra
Modalidad: mutable
Polaridad: femenina(Ying)
Planeta regente: Mercurio
Casa: 6
Metal: mercurio
Piedra: jaspe rosado, jacinto y topacio
Color: amarillo y blanco
Período: del 23 de Agosto al 22 de Septiembre
Elemento: tierra
Modalidad: mutable
Polaridad: femenina(Ying)
Planeta regente: Mercurio
Casa: 6
Metal: mercurio
Piedra: jaspe rosado, jacinto y topacio
Color: amarillo y blanco
Virgo es el signo de la Virgen, pero es mejor no tomarse el simbolismo demasiado al pie de la letra. Haber nacido en septiembre no es garantía de virginidad. Aunque muchos Virgo de ambos sexos se aferren a su soltería, también hay muchos que terminan por emparejarse, pero el matrimonio no es el estado natural para los seres de Virgo, aunque es sorprendente cuantos de ellos llegan a mostrárse casi siempre muy dedicados a su familia.
Casado o soltero, es bastante fácil detectar a Virgo en público. Por una parte, no estará haciendo mucho ruido; no es parlanchín, y se destacará por su condición de solitario. Si andas en busca de estos perfeccionistas, las reuniones sociales no son el mejor coto de caza. Es más probable que los encuentres en la oficina, trabajando horas extras, que demostrando su carácter sociable en un coctel. Para Virgo no es fácil relajarse lo suficiente para disfrutar sin aprensión de los placeres sociales, porque básicamente se siente incómodo entre la multitud. A veces, por pura frustración, hace el intento de adaptarse a la rutina de alguna fiesta, pero la llamada del deber es demasiado insistente para permitirle mucha frivolidad.
Lo primero que observarás en un nativo típico de Virgo es la vaga sensación que da de estar preocupado por algo. Es probable que así sea. Para Virgo, estar preocupado es natural. Su encantadora sonrisa siempre parece estar escondiendo una gran inquietud.
Aunque el ascendente y otras posiciones natales puedan modificar la figura típica, generalmente puedes esperar una estructura como si fuera de alambre y unos ojos excepcionalmente bellos y tranquilos. Es frecuente que uno casi pueda verse reflejado en ellos; expresan la inteligencia y la claridad de pensamiento. En los rasgos de Virgo hay una pureza y una tranquilidad de expresión que parecen la negación de sus secretas preocupaciones.
La mayoría de ellos son gente muy atractiva, de nariz, orejas y labios bien diseñados. No carecen ciertamente de gracia y encanto, y pueden mostrar cierta vanidad que irrumpe en raros momentos. Nunca les satisfacen las fotografías que les toman, y son sumamente remilgados con su aspecto. Los puedes encontrar retocándose frente al espejo, cuando creen que nadie les mira. Siempre van bien vestidos, con un gusto
generalmente meticuloso, aunque conservador.
Las personas Virgo son normalmente menudas, nunca gigantescas, pero musculosas, y están dotadas de mucha más fuerza de lo que da a entender su apariencia de fragilidad. Son capaces de aguantar un trabajo más intenso, y durante un tiempo más largo que gente regida por signos más fuertes y recios, siempre que durante esa actividad puedan evitar un colapso nervioso. Por más que exteriormente se muestren capaces y serenos, su angustia interior les altera la digestión y el equilibrio emocional.
Lo que se oculta tras los nervios de más de un Virgo es esa tendencia a aceptar más trabajo del que pueden hacer sin riesgo, y después esforzarse hasta no poder más para cumplir con los compromisos asumidos.
Son gente nacida para ser tranquila y apacible, cuando sus complejos y delicados mecanismos funcionan sin problemas. Son incuestionablemente gente confiable y sincera, pero, son capaces de fingir una enfermedad cuando no quieren hacer algo o ir a alguna parte. En esas ocasiones, pasa a primer plano su talento latente de actor.
Ocasionalmente, consiguen auto convencerse de esas enfermedades imaginarias, pero el ojo frío y la cabeza despejada de la gente regida por Mercurio hacen que la mayor parte de tales autoengaños sean de vida breve.
Son minuciosos y pulcros en su arreglo, sus comidas, su trabajo y sus romances. También tiene ideas muy precisas sobre la salud, poca paciencia con la haraganería, y se hace muy pocas ilusiones sobre la vida y la gente, aun cuando esté enamorado. Sea hombre o mujer, un romance jamás tiende ante los ojos de Virgo un velo tan espeso que le impida ver los inconvenientes de la relación o de su pareja.
No debes formarte la idea de que toda la gente Virgo es remilgada, quisquillosa y dogmática. Son muchos los que muestran un inteligente humor mercuriano e irradian un especial encanto mercuriano muy difícil de resistir, o alguno que ande tan ocupado manteniendo en orden los rincones de su mente que se haya descuidado en cuanto a su vestimenta o a su ambiente.
Cuando se sienten molestos por la vulgaridad, la estupidez o el descuido, los nativos de Virgo pueden ponerse súbitamente irritables, gruñones y nerviosos, pero por lo general son gente muy dulce, muy grata de tener cerca, especialmente cuando estés enfermo. En el cuarto de baño de un VIrgo, el botiquín estará cargado de remedios, pero jamás tomará una medicina a menos que conozca todos sus componentes y sepa como actúan, de modo que podrá decirte con total conocimiento de causa lo que puedes tomar.
Un nativo de Virgo puede criticar algo que tú digas, con argumentos tan rebuscados que te vuelvan loco, pero si te ve en un aprieto, será él quien se apresure a volver a poner las cosas en orden, sin otro afán que el de ser útil, Virgo siempre se arremangará de buena gana para ayudarte. No son motivos egoístas los que le llevan a hacerse cargo de las cosas cuando ve que algo está hecho un lío; es que su ordenada mentalidad mercuriana no puede soportar las demoras, los detalles descuidados ni la confusión
de objetivos. Hasta es posible que se ponga a enderezar las cosas antes de que se lo pidan, sin intención de ser impertinente, porque para él es algo instintivo poner orden en el caos.
Virgo es rápido para negar sus hábitos y rasgos de carácter. Es aparentemente ciego
para sus propios defectos, e incapaz de ver sus debilidades bajo la misma clara luz que le permite ver las de los demás. Pero la verdad es que Virgo las ve, y las ve con tal riqueza de detalles que no puede soportar que se hable de ellas en términos generales. Intenta decir a un Virgo típico que es criticón, caviloso, remilgado, ¿Quién, él? Él no es así, que tontería.
No es nada difícil distinguir al nativo de este signo en una habitación llena de gente, es incapaz de estarse mucho tiempo quieto. Después de un rato se le verá visiblemente inquieto y empezará a pasearse o a cambiar de lugar las sillas, transmitiendo una vaga sensación de urgencia. Al mismo tiempo, su rostro exhibirá una tranquilidad un poco como de máscara. Es raro que todo el daño que puede causar la intensidad nerviosa de Virgo se manifieste del todo exteriormente, pero sin duda por dentro es capaz de alterarle todo el sistema digestivo. Por eso es tan frecuente que lleven consigo un tubo de pastillas para el estómago.
Son muchos los nativos de Virgo que cojean ligeramente o que tienen alguna característica peculiar o desusada en su porte o su manera de andar. No son gentes que se muestren derrochadoras ni con sus afectos ni con el dinero. Normalmente prudentes en ambos aspectos, su amor se manifiesta de forma tranquila y
constante, con poca ostentación, y manejan el dinero con la misma mesura conservadora.
Un rasgo extraño es que, dispuestos como están a ofrecer sus diligentes servicios a los demás, los nativos de Virgo sienten un intenso disgusto, casi neurótico, cuando tienen que aceptar favores. No quieren tener obligaciones con nadie, por ninguna razón, ni quieren depender para nada de nadie más que de ellos mismos. Un miedo profundamente arraigado a tener que pedir ayuda en la vejez es lo que hace que muchos de este signo vivan con tal economía que pueden llegar a parecer tacaños. En realidad, la palabra es demasiado dura. Cuando no necesita preocuparse por el futuro, Virgo gasta con mas libertad el dinero, por más que incluso entonces si no siente que ha recibido el valor total de lo gastado, volverá a la tienda a que le reembolsen su dinero.
Aunque no siente absolutamente ninguna simpatía por los mendigos ni por la gente ociosa y manirrota, Virgo es generoso con los amigos en dificultades. Puede ser casi ávaro en lo que se refiere a sus necesidades personales, pero tendrá gestos increíbles de apoyo financiero con quienes realmente lo merecen o con la gente que de veras le gusta o a quien ama. Sin embargo, jamás le encontrarás derrochando el dinero, ya que el despilfarro es una de las cosas que menos le gustan.
La gente de Virgo trabaja duro para tener lo que tiene, y el lujo desmedido nunca deja de escandalizarlos. Generalmente, tienen opiniones muy claras, y no se dedican a ocultarlas, sobre los despilfarradores y los haraganes que no quieren trabajar. Aunque hay algo que hará que te resulten un poco menos punzantes las criticas de Virgo, y es saber que, secretamente, el ojo crítico con que te mira es el mismo que utiliza para mirarse a sí mismo. Simplemente, no puede dejar de ver los fallos.
No será con los impuntuales más piadoso de lo que es con los derrochadores. En realidad, llegar tarde es un desperdicio; es una pérdida de tiempo, y para Virgo el tiempo es la tela con que está hecha la vida. Así que, si quieres evitar su tajante desaprobación, se puntual.
Es difícil entender por que a veces se considera egoísta a la gente Virgo, ya que por lo común encuentran más satisfacción en servir a otros que en satisfacer sus propias ambiciones personales. La etiqueta de egoísta se debe probablemente a la capacidad de Virgo para decir <<no>> y decirlo en serio. Es generoso con su tiempo y su energía, pero sin ir más allá de lo razonable. Cuando las demandas se hacen excesivas, Virgo se planta y se expresa con claridad, y hasta con demasiada claridad.
Tanto como le gusta señalar los fallos de otros, se resiente orgullosamente ante la crítica abierta de sus propios errores. Cuando algún Virgo cometa un error, lo que no es muy frecuente, señálaselo con tacto si quieres conservar su amistad.
Son personas sorprendentemente sanas, salvo que caigan enfermos por las preocupaciones, exceso de trabajo, tensión mental y pesimismo. Se ocupan mucho
de su cuerpo y son escrupulosos con su dieta. Es posible que así y todo se quejen de algunas dolencias menores: malestar de estómago, indigestión, dolores crónicos en la zona intestinal, dolores de cabeza y problemas en los pies. Deben cuidarse cuando atrapan un resfriado de pecho, porque son susceptibles a las afecciones pulmonares Es fácil que sufran dolores en las caderas, brazos y hombros, que tengan problemas de gota, reumáticos y artríticos y a veces insuficiencia hepática y dolores de espalda. Pero la preocupación por su salud hará que Virgo evite la mayoría de las enfermedades graves. Muchos de ellos son vegetarianos y, si no lo son, ya puedes apostar a que saben exactamente que es lo que tienen que comer y cómo hay que cocinarlo.
Les gustan los gatos, los pájaros y los seres pequeños e indefensos. También aman la verdad, la puntualidad, la economía, la prudencia y una discreta selectividad. Aborrecen los torrentes de sentimentalismo, la suciedad, lo vulgar, el abandono y la ociosidad. Son de naturaleza práctica, con excesiva tendencia a la discriminación.
Una vez que ha aprendido a dominar los complicados detalles de la vida, en vez de dejarse dominar por ellos, Virgo es más capaz de dar forma a su propio destino que cualquier otro signo solar.
La buena suerte de Virgo va siempre seguida por cinco clases de soledad, y la llamada del deber jamás se acalla del todo en su corazón. No olvides que la tímida sonrisa pensativa de Virgo oculta algunos secretos, por su sangre tranquila circulan la líquida plata de Mercurio.
Subyacente a la gravedad de su porte esta el aura fascinante de la Virgen: la pureza de intención y de pensamiento, simbolizada por el jacinto de Virgo. Una vez que has conocido la fragancia de esta flor pascual, jamás te liberarás del todo de su hechizo: volverá cada primavera a rondar tu memoria. Virgo tiene su propia y secreta manera de hacer que el corazón recuerde.
Casado o soltero, es bastante fácil detectar a Virgo en público. Por una parte, no estará haciendo mucho ruido; no es parlanchín, y se destacará por su condición de solitario. Si andas en busca de estos perfeccionistas, las reuniones sociales no son el mejor coto de caza. Es más probable que los encuentres en la oficina, trabajando horas extras, que demostrando su carácter sociable en un coctel. Para Virgo no es fácil relajarse lo suficiente para disfrutar sin aprensión de los placeres sociales, porque básicamente se siente incómodo entre la multitud. A veces, por pura frustración, hace el intento de adaptarse a la rutina de alguna fiesta, pero la llamada del deber es demasiado insistente para permitirle mucha frivolidad.
Lo primero que observarás en un nativo típico de Virgo es la vaga sensación que da de estar preocupado por algo. Es probable que así sea. Para Virgo, estar preocupado es natural. Su encantadora sonrisa siempre parece estar escondiendo una gran inquietud.
Aunque el ascendente y otras posiciones natales puedan modificar la figura típica, generalmente puedes esperar una estructura como si fuera de alambre y unos ojos excepcionalmente bellos y tranquilos. Es frecuente que uno casi pueda verse reflejado en ellos; expresan la inteligencia y la claridad de pensamiento. En los rasgos de Virgo hay una pureza y una tranquilidad de expresión que parecen la negación de sus secretas preocupaciones.
La mayoría de ellos son gente muy atractiva, de nariz, orejas y labios bien diseñados. No carecen ciertamente de gracia y encanto, y pueden mostrar cierta vanidad que irrumpe en raros momentos. Nunca les satisfacen las fotografías que les toman, y son sumamente remilgados con su aspecto. Los puedes encontrar retocándose frente al espejo, cuando creen que nadie les mira. Siempre van bien vestidos, con un gusto
generalmente meticuloso, aunque conservador.
Las personas Virgo son normalmente menudas, nunca gigantescas, pero musculosas, y están dotadas de mucha más fuerza de lo que da a entender su apariencia de fragilidad. Son capaces de aguantar un trabajo más intenso, y durante un tiempo más largo que gente regida por signos más fuertes y recios, siempre que durante esa actividad puedan evitar un colapso nervioso. Por más que exteriormente se muestren capaces y serenos, su angustia interior les altera la digestión y el equilibrio emocional.
Lo que se oculta tras los nervios de más de un Virgo es esa tendencia a aceptar más trabajo del que pueden hacer sin riesgo, y después esforzarse hasta no poder más para cumplir con los compromisos asumidos.
Son gente nacida para ser tranquila y apacible, cuando sus complejos y delicados mecanismos funcionan sin problemas. Son incuestionablemente gente confiable y sincera, pero, son capaces de fingir una enfermedad cuando no quieren hacer algo o ir a alguna parte. En esas ocasiones, pasa a primer plano su talento latente de actor.
Ocasionalmente, consiguen auto convencerse de esas enfermedades imaginarias, pero el ojo frío y la cabeza despejada de la gente regida por Mercurio hacen que la mayor parte de tales autoengaños sean de vida breve.
Son minuciosos y pulcros en su arreglo, sus comidas, su trabajo y sus romances. También tiene ideas muy precisas sobre la salud, poca paciencia con la haraganería, y se hace muy pocas ilusiones sobre la vida y la gente, aun cuando esté enamorado. Sea hombre o mujer, un romance jamás tiende ante los ojos de Virgo un velo tan espeso que le impida ver los inconvenientes de la relación o de su pareja.
No debes formarte la idea de que toda la gente Virgo es remilgada, quisquillosa y dogmática. Son muchos los que muestran un inteligente humor mercuriano e irradian un especial encanto mercuriano muy difícil de resistir, o alguno que ande tan ocupado manteniendo en orden los rincones de su mente que se haya descuidado en cuanto a su vestimenta o a su ambiente.
Cuando se sienten molestos por la vulgaridad, la estupidez o el descuido, los nativos de Virgo pueden ponerse súbitamente irritables, gruñones y nerviosos, pero por lo general son gente muy dulce, muy grata de tener cerca, especialmente cuando estés enfermo. En el cuarto de baño de un VIrgo, el botiquín estará cargado de remedios, pero jamás tomará una medicina a menos que conozca todos sus componentes y sepa como actúan, de modo que podrá decirte con total conocimiento de causa lo que puedes tomar.
Un nativo de Virgo puede criticar algo que tú digas, con argumentos tan rebuscados que te vuelvan loco, pero si te ve en un aprieto, será él quien se apresure a volver a poner las cosas en orden, sin otro afán que el de ser útil, Virgo siempre se arremangará de buena gana para ayudarte. No son motivos egoístas los que le llevan a hacerse cargo de las cosas cuando ve que algo está hecho un lío; es que su ordenada mentalidad mercuriana no puede soportar las demoras, los detalles descuidados ni la confusión
de objetivos. Hasta es posible que se ponga a enderezar las cosas antes de que se lo pidan, sin intención de ser impertinente, porque para él es algo instintivo poner orden en el caos.
Virgo es rápido para negar sus hábitos y rasgos de carácter. Es aparentemente ciego
para sus propios defectos, e incapaz de ver sus debilidades bajo la misma clara luz que le permite ver las de los demás. Pero la verdad es que Virgo las ve, y las ve con tal riqueza de detalles que no puede soportar que se hable de ellas en términos generales. Intenta decir a un Virgo típico que es criticón, caviloso, remilgado, ¿Quién, él? Él no es así, que tontería.
No es nada difícil distinguir al nativo de este signo en una habitación llena de gente, es incapaz de estarse mucho tiempo quieto. Después de un rato se le verá visiblemente inquieto y empezará a pasearse o a cambiar de lugar las sillas, transmitiendo una vaga sensación de urgencia. Al mismo tiempo, su rostro exhibirá una tranquilidad un poco como de máscara. Es raro que todo el daño que puede causar la intensidad nerviosa de Virgo se manifieste del todo exteriormente, pero sin duda por dentro es capaz de alterarle todo el sistema digestivo. Por eso es tan frecuente que lleven consigo un tubo de pastillas para el estómago.
Son muchos los nativos de Virgo que cojean ligeramente o que tienen alguna característica peculiar o desusada en su porte o su manera de andar. No son gentes que se muestren derrochadoras ni con sus afectos ni con el dinero. Normalmente prudentes en ambos aspectos, su amor se manifiesta de forma tranquila y
constante, con poca ostentación, y manejan el dinero con la misma mesura conservadora.
Un rasgo extraño es que, dispuestos como están a ofrecer sus diligentes servicios a los demás, los nativos de Virgo sienten un intenso disgusto, casi neurótico, cuando tienen que aceptar favores. No quieren tener obligaciones con nadie, por ninguna razón, ni quieren depender para nada de nadie más que de ellos mismos. Un miedo profundamente arraigado a tener que pedir ayuda en la vejez es lo que hace que muchos de este signo vivan con tal economía que pueden llegar a parecer tacaños. En realidad, la palabra es demasiado dura. Cuando no necesita preocuparse por el futuro, Virgo gasta con mas libertad el dinero, por más que incluso entonces si no siente que ha recibido el valor total de lo gastado, volverá a la tienda a que le reembolsen su dinero.
Aunque no siente absolutamente ninguna simpatía por los mendigos ni por la gente ociosa y manirrota, Virgo es generoso con los amigos en dificultades. Puede ser casi ávaro en lo que se refiere a sus necesidades personales, pero tendrá gestos increíbles de apoyo financiero con quienes realmente lo merecen o con la gente que de veras le gusta o a quien ama. Sin embargo, jamás le encontrarás derrochando el dinero, ya que el despilfarro es una de las cosas que menos le gustan.
La gente de Virgo trabaja duro para tener lo que tiene, y el lujo desmedido nunca deja de escandalizarlos. Generalmente, tienen opiniones muy claras, y no se dedican a ocultarlas, sobre los despilfarradores y los haraganes que no quieren trabajar. Aunque hay algo que hará que te resulten un poco menos punzantes las criticas de Virgo, y es saber que, secretamente, el ojo crítico con que te mira es el mismo que utiliza para mirarse a sí mismo. Simplemente, no puede dejar de ver los fallos.
No será con los impuntuales más piadoso de lo que es con los derrochadores. En realidad, llegar tarde es un desperdicio; es una pérdida de tiempo, y para Virgo el tiempo es la tela con que está hecha la vida. Así que, si quieres evitar su tajante desaprobación, se puntual.
Es difícil entender por que a veces se considera egoísta a la gente Virgo, ya que por lo común encuentran más satisfacción en servir a otros que en satisfacer sus propias ambiciones personales. La etiqueta de egoísta se debe probablemente a la capacidad de Virgo para decir <<no>> y decirlo en serio. Es generoso con su tiempo y su energía, pero sin ir más allá de lo razonable. Cuando las demandas se hacen excesivas, Virgo se planta y se expresa con claridad, y hasta con demasiada claridad.
Tanto como le gusta señalar los fallos de otros, se resiente orgullosamente ante la crítica abierta de sus propios errores. Cuando algún Virgo cometa un error, lo que no es muy frecuente, señálaselo con tacto si quieres conservar su amistad.
Son personas sorprendentemente sanas, salvo que caigan enfermos por las preocupaciones, exceso de trabajo, tensión mental y pesimismo. Se ocupan mucho
de su cuerpo y son escrupulosos con su dieta. Es posible que así y todo se quejen de algunas dolencias menores: malestar de estómago, indigestión, dolores crónicos en la zona intestinal, dolores de cabeza y problemas en los pies. Deben cuidarse cuando atrapan un resfriado de pecho, porque son susceptibles a las afecciones pulmonares Es fácil que sufran dolores en las caderas, brazos y hombros, que tengan problemas de gota, reumáticos y artríticos y a veces insuficiencia hepática y dolores de espalda. Pero la preocupación por su salud hará que Virgo evite la mayoría de las enfermedades graves. Muchos de ellos son vegetarianos y, si no lo son, ya puedes apostar a que saben exactamente que es lo que tienen que comer y cómo hay que cocinarlo.
Les gustan los gatos, los pájaros y los seres pequeños e indefensos. También aman la verdad, la puntualidad, la economía, la prudencia y una discreta selectividad. Aborrecen los torrentes de sentimentalismo, la suciedad, lo vulgar, el abandono y la ociosidad. Son de naturaleza práctica, con excesiva tendencia a la discriminación.
Una vez que ha aprendido a dominar los complicados detalles de la vida, en vez de dejarse dominar por ellos, Virgo es más capaz de dar forma a su propio destino que cualquier otro signo solar.
La buena suerte de Virgo va siempre seguida por cinco clases de soledad, y la llamada del deber jamás se acalla del todo en su corazón. No olvides que la tímida sonrisa pensativa de Virgo oculta algunos secretos, por su sangre tranquila circulan la líquida plata de Mercurio.
Subyacente a la gravedad de su porte esta el aura fascinante de la Virgen: la pureza de intención y de pensamiento, simbolizada por el jacinto de Virgo. Una vez que has conocido la fragancia de esta flor pascual, jamás te liberarás del todo de su hechizo: volverá cada primavera a rondar tu memoria. Virgo tiene su propia y secreta manera de hacer que el corazón recuerde.
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